Psicología y psicoterapias cognitivas. Psicología positiva. Autoayuda. Investigaciones. Opinión. Neurociencias.

Escena narrativa: paciente y terapeuta

| 20/6/07
Un ejemplo de cómo un paciente puede darse cuenta de las inconsistencias en su sistema de creencias se presenta en el siguiente diálogo con una paciente de 25 años que acababa de intentar suicidarse y aún abrigaba esta idea. Pensaba que su vida había "terminado" porque su marido le era infiel. Un aspecto interesante es que el terapéuta se dedicó sistemáticamente a formular preguntas que pudiesen proporcionar datos contradictorios con las conclusiones de la paciente y, por lo tanto, que fomentasen pensamientos más lógicos.

Terapeuta: ¿Por qué quiere poner fin a su vida?
Paciente: Sin Raymond, no soy nada ...No puedo ser feliz sin él ...Pero no puedo salvar nuestro matrimonio.
T: ¿Cómo ha sido su matrimonio?
P: Ha sido muy desgraciado desde el principio... Raymond siempre me ha sido infiel... Apenas le he visto durante los últimos cinco años.
T: Dice usted que no puede ser feliz sin Raymond...¿Ha sido feliz mientras estaba con él?
P: No, nos peléabamos continuamente y yo me sentía peor.
T: Entonces, ¿por qué piensa que Raymond es esencial en su vida?
P: Creo que es porque sin él no soy nada.
T: ¿Le importaría repetir eso?
P: Sin Raymond, no soy nada.
T: ¿Qué piensa de esa idea?
P: ... Bueno, ahora que lo pienso, creo que no es completamente cierta.
T: Dice que no es "nada" sin Raymond. Antes de conocerle, ¿pensaba que no era "nada"?
P: No.
T: Entonces, ¿está diciendo que es posible ser alguien sin Raymond?
P: Creo que si. Puedo ser alguien sin él.
T: Si usted era alguien antes de conocerle, ¿por qué le necesita para ser alguien ahora?
P: (confundida): Mmmm...
T: Usted parece indicar que no puede seguir viviendo sin Raymond.
P: Bueno, no creo que pueda encontrar a alguien como él.
T: ¿Tenía usted amigos antes de conocer a Raymond?
P: Yo era bastante popular entonces.
T: Así pues, si yo la he entendido bien, usted era capaz de enamorarse de otros hombre y varios de ellos se enamoraron de usted.
P: Ya lo creo.
T: ¿Por qué piensa que ahora, sin Raymond, no sería popular?
P: Porque los hombre no se sienten atraidos por mi.
T: ¿Ha habido algún hombre que haya mostrado interés por usted, estando ya casada?
P: Muchos hombre se han fijado en mi, pero yo los he ignorado.
T: Si usted no estuviese casada, ¿cree que los hombres se interesarían por usted -sabiendo que no tenía compromiso?
P: Supongo que si
T: ¿Es posible que usted encontrase a un hombre más fiel que Raymond?
P: No se... supongo que podría ser
T: ¿Cree usted que existen otros hombres tan buenos como Raymond?
P: Creo que existen hombres mejores que Raymond por la sencilla razón de que Raymond no me quiere.
T: Dice que no puede soportar la idea de que se rompa su matrimonio. ¿Es cierto que apenas ha visto a su marido durante los últimos cinco años?
P: Es cierto. Solamente le he visto un par de veces al año.
T: ¿Hay alguna posibilidad de volver con él?
P: No, él está con otra mujer. No me quiere.
T: Entonces, ¿qué es lo que perdería usted al disolver el matrimonio?
P: No lo se.
T: Es posible que a usted le fuese mejor después de poner fin a su matrimonio.
P: Eso no me lo garantiza nadie.
T: ¿Es el suyo un verdadero matrimonio?
P: Supongo que no.
T: Si su matrimonio no es un verdadero matrimonio, ¿qué ha de perder si decide ponerle fin?
P: (llorando): Nada, creo.
T: Bien, ¿qué piensa de la posibilidad de encontrar a otra persona?
P: Ya se por dónde va usted y se que va bien encaminado. Realmente he estado pensando que ya no hay ninguna razón para que yo siga "pegada" a Raymond cuando está claro que él no me quiere. Creo que lo mejor que puedo hacer es una ruptura amistosa.
T: Si lo hiciese, ¿cree que podría sentirse atraída por otros hombres?
P: Antes fui capaz de enamorarme de otros.
T: Bien, ¿qué piensa?, ¿podría enamorarse de nuevo?
P: Si, creo que si.

En este momento de la discusión, era evidente que la paciente ya no estaba deprimida y que no iba a suicidarse. El objetivo de la terapia era hacer que se diese cuenta de que no perdía nada separándose de Raymond (ya que la relación no existía de hecho) y de que había otras opciones para ella. El terapeuta también comenzó a hacer mella en la fórmula, "Si no soy amada, no soy nada".

Después de esta entrevista, la paciente estaba más alegre y parecía haber superado la crisis de suicidio. En la siguien sesión, dijo que había una cuestión sobre la que no había dejado de hacerse preguntas en casa: ¿Cómo podía no ser "nada" sin Raymond, cuando había vivido feliz y había sido una persona como las demás antes de conocerle? En base a la revisión de las preguntas formuladas por el terapeuta en la sesión anterior, había decidido separarse legalmente. Al poco tiempo, estaba divorciada y adaptada a una vida más estable.

En este caso, las preguntas iban dirigidas a las creencias de la paciente de que (a) necesitaba a su marido para ser feliz, para funcionar y para tener una identidad propia, (b) tenía un matrimonio viable o, al menos, que podía salvarse, (c) el final de su matrimonio sería una pérdida irreversible y (d) no tenía futuro sin su marido. La paciente consiguió darse cuenta de la falacia de sus creencias y sus pensamientos; en consecuencia, se dio cuenta de que tenía otras alternativas además de las dos que había considerado: bien intentar salvar un matrimonio ya deshecho, o bien suicidarse. En otros casos, el terapeuta tiene que trabajar con el paciente para generar alternativas más realistas a las ideas de suicidio.

Material consultado:
Terapia cognitiva de la depresión. Beck, A. y otros. pp.198-200. Descleé de Brouwer, Bibao, 2000.

2 comentarios:

Unknown dijo...

DE VERDAD ME AYUDO MUCHO, PUDE HACER MI TAREA SOBRE UN DIALOGO DE FILOSOFIA, Y MUY BUENA EXPLICACION, GRACIAS

Unknown dijo...

excelente ejemplo de un dialogo me sirvio para hacer mi tarea, me ayudo a ir comprendiendo como debo preguntarle a la persona que voy a ayudar.
Espero continuar viendo ejemplos para asi pulir mis habilidades y lograr mejorar la calidad de servivio que prestare a futuro.
Muchisimas gracias.